Juan Carlos

juan Carlos

Juan Carlos vino a vivir con nosotros cuando tenía 8 años de edad. Era un niño muy activo, le gustaba jugar al fútbol, ​​y disfrutaba de las mismas cosas sencillas que les gustan a todos los niños. Con la adolescencia, hubo confusión y a veces rebeldía, lo buscamos para platicar y para orar con él y por él, para que pudiera hacer frente a la agitación emocional de tristeza y confusión ocasionada por el abandono de sus padres.
Juan Carlos dejó Hogar Exodo hace dos meses, cumplió 19 años y ahora está a punto de graduarse de Bachillerato. Nos dijo que quería irse y ser independiente y tuvimos que dejarlo ir. Le ayudamos a establecerse en la ciudad y lo llevamos a una entrevista para conseguir un trabajo en el negocio de un amigo de la Fundación. Lo acompañamos a la tienda de comestibles para enseñarle a comprar sus víveres, y hablamos con él sobre sus finanzas.
Ahora él está lejos, pero siempre será parte de Exodo. Le echamos de menos, pero nos mantenemos en contacto. Su jefe nos dijo el otro día que está siendo muy responsable y que es un buen trabajador. Esperamos poder ayudarle a conseguir su objetivo: convertirse en un mecánico de aviación.
La vida de Juan Carlos cambió porque Dios lo protegió y lo llevó al Hogar Exodo. Sigamos orando por Juan Carlos, para que pueda actuar con sabiduría en su vida y tomar  las mejores decisiones, las decisiones que honren a Dios.